Mariano Albrisi, abogado laboral y secretario gremial del Colegio de Abogados, dialogó con La 10 Córdoba en el programa «En Tiempo Real» y analizó en profundidad el nuevo proyecto de reforma laboral. El especialista advirtió que, si bien es necesaria una modernización de la legislación del ’75, la propuesta actual presenta serias deficiencias y oculta trampas tanto para trabajadores como para empleadores.
El Dr. Albrisi fue contundente al señalar que el proyecto tiene «doble discurso». «Al empleador le promete flexibilidad, pero si se lee bien la ley, todas las modificaciones profundas que afectarían al trabajador las deja sujetas a la negociación colectiva con los sindicatos», explicó.
Por el lado de los trabajadores, advirtió que aunque se prometen algunos beneficios, «claramente hay una reducción de los beneficios que actualmente están vigentes en la ley de contrato de trabajo».

El Problema de Fondo: La Carga Impositiva
El Dr. Mariano Albrisi, identificó que la raíz del problema laboral en Argentina no está en la legislación, sino en la presión fiscal. «Por cada salario que pago de un millón de pesos, el Estado se lleva 500 mil en aportes. El empleado es un socio del empresario, pero el socio bobo es el Estado», sentenció.
Según Albrisi, esto explica por qué persiste el trabajo no registrado y la litigiosidad laboral: «No existiría industria del juicio si el Estado redujera las cargas fiscales al empleador. Pero eso no pasa».
Nuevas Generaciones y Viejos Sindicatos
El especialista destacó que los jóvenes entre 18 y 40 años tienen otra mentalidad: «Quieren libertad, autonomía, usar su tiempo y una mínima previsibilidad. No es que se nieguen a estar en blanco, quieren derechos laborales distintos, más dinámicos».
Sin embargo, criticó duramente el rol sindical: «El sindicalismo argentino está callado, silenciado. No sé por qué. Vive en su zona de confort. Los trabajadores están cansados de las clases sindicales, hay un hartazgo».

Puntos Críticos del Proyecto
Entre los aspectos más polémicos que analizó Albrisi:
- Modificación unilateral de condiciones laborales: El empleador podría cambiar horarios, días de trabajo y otras condiciones esenciales, dejando al trabajador solo la opción de aceptar o ser despedido.
- Salarios complementarios no remunerativos: Gimnasio, prepaga y otros beneficios no computarían para la jubilación futura, licuando los aportes previsionales.
- Jornada laboral extendida: Se legitimarían jornadas de 12 horas en menos días, sin pago de horas extras.
- Vacaciones partidas: Algo que ya sucede en la práctica, ahora se formalizaría.
¿Para Quién Es Esta Ley?
«Si esta ley la apuntamos a la macroempresa es brillante, si es de ahí para abajo no es brillante», afirmó categóricamente. Según el abogado, las micro, pequeñas y medianas empresas quedarán «absolutamente desprotegidas» con este sistema.
El Dr. Albrisi concluyó que lo que realmente se necesita es «una reforma que genere empleo, y eso es fiscal, tributario, impositivo. Una legislación que le dé tranquilidad al empleador para contratar y al trabajador para tener una estabilidad mínima».



