La iniciativa, modernizada durante la gestión de Paserini, produce paracetamol, repelentes y suma esta semana amlodipino para hipertensión y metformina para diabetes, con distribución controlada por médicos del sistema municipal
El secretario de Salud de la Municipalidad de Córdoba, Ariel Aleksandroff, anunció los avances del laboratorio municipal que ha expandido significativamente su producción más allá del alcohol en gel para incluir medicamentos estratégicos destinados a la población.
El laboratorio, cuya historia se remonta a más de un siglo cuando funcionaba como una botica, fue completamente modernizado durante la gestión del intendente Daniel Paserini. Actualmente cuenta con infraestructura certificada, procedimientos estandarizados y personal especializado que garantiza el cumplimiento de las normas del Ministerio de Salud.


Entre los primeros medicamentos que ya se distribuyen se encuentran paracetamol y repelente de insectos. Esta semana se incorporan dos fármacos fundamentales: amlodipino para el tratamiento de la hipertensión y metformina para la diabetes. «Estas patologías son las principales causas de mortalidad y ahora los vecinos podrán acceder a los tratamientos de manera accesible y segura», explicó Aleksandroff.
La producción municipal representa un ahorro sustancial para el sistema de salud: 63% en el caso del amlodipino y 50% en metformina. Estos recursos se reinvierten en tecnología y la ampliación del catálogo de medicamentos disponibles.
El funcionario adelantó que próximamente se sumarán diclofenac con vitamina B12, metoclopramida y otros antihistamínicos de uso frecuente en la población.

Un aspecto clave del programa es que la distribución está controlada por médicos del sistema de salud municipal, asegurando que cada paciente reciba el tratamiento adecuado sin depender del mercado privado. Además, el laboratorio ya provee medicamentos a otros municipios de la provincia que carecen de estas instalaciones.
Con esta iniciativa, la Municipalidad de Córdoba fortalece la salud pública, reduce costos operativos y ofrece soluciones concretas a la comunidad, demostrando que un laboratorio municipal puede ser eficiente, seguro y estratégico para toda la región.