Con solo ocho capítulos y ambientada en el submundo del juego clandestino en Río de Janeiro, esta producción brasileña de Netflix combina poder, corrupción, erotismo y traiciones. Protagonizada por André Lamoglia, el actor de Élite, la serie se convirtió rápidamente en una de las más vistas de la plataforma y promete una dosis de adrenalina en cada episodio.
En tiempos en los que las plataformas pelean por nuestra atención cada minuto, aparece una producción que se mete silenciosamente en el Top 10 y termina convirtiéndose en tema de conversación: poder, corrupción, deseo y un protagonista que viene directamente desde Élite.
Se trata de Los dueños del juego (Os donos do jogo), la nueva apuesta de Netflix que está causando furor en toda Latinoamérica. Con solo 8 capítulos, ritmo vertiginoso y un universo cargado de tensión, la serie brasileña se planta como uno de los estrenos más potentes del año.
La historia nos lleva a Río de Janeiro, donde el negocio clandestino del juego mueve fortunas y define destinos. Allí conocemos a Profeta Moraes, interpretado por André Lamoglia, el actor argentino-brasileño que brilló en Élite. Ambicioso, inteligente y decidido a llegar a lo más alto, Profeta se mete de lleno en una red criminal que controla apuestas ilegales y que no perdona a quien intente cambiar las reglas.
El conflicto estalla cuando Brasil se prepara para legalizar el juego, una decisión que amenaza con romper el equilibrio de poder entre las familias mafiosas. A partir de ese momento, nada vuelve a ser seguro: traiciones, alianzas peligrosas, romances que complican todo y una guerra en las sombras por controlar el negocio.
La serie está dirigida por Heitor Dhalia (responsable de producciones como Tropa de Elite 2) y combina lo mejor del thriller con escenas visualmente impactantes: casinos clandestinos iluminados por neones, barrios donde la ley no existe y personajes que harán lo que sea por sobrevivir.
En cada episodio, el espectador entra más profundo en el submundo donde el poder se compra con sangre.
Con un elenco sobresaliente —Mel Maia, Giullia Buscaccio, Juliana Paes, Chico Díaz, Xamã y más nombres fuertes de Brasil— la propuesta funciona como una radiografía cruda de la ambición. Para los fans de DNA do Crime o Narcos, esta serie es un viaje sin frenos.
Netflix la resume así:
“Profeta aspira a escalar posiciones en el mundo de las apuestas de Río, sin saber del peligroso juego de traición, lujuria y sangre que le espera”.
Si buscás algo atrapante, intenso, sexy y con mucha acción, esta es tu próxima maratón.



