El gobernador bonaerense denunció que la Casa Rosada busca negociar deudas nacionales a cambio del apoyo a reformas, mientras el mandatario cordobés se reunió con funcionarios nacionales para discutir el Presupuesto 2026 y abogó por una «modernización del trabajo» consensuada.
El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, apuntó este martes contra los mandatarios provinciales que se reunieron con el Gobierno nacional y denunció que la Casa Rosada busca «canjear deudas por leyes que perjudican al pueblo». Durante un acto en Florencio Varela, donde inauguró un Centro de Atención Integral de Rehabilitación para personas con discapacidad, el mandatario bonaerense cuestionó la estrategia oficial: «Mientras tenemos mil obras paralizadas, Milei convocó a los gobernadores para negociar deudas de Nación a cambio de leyes espantosas».
Kicillof también explicó por qué fue excluido de esas reuniones con el Ejecutivo nacional: «Milei sabe que este gobernador no va a acompañar ninguna ley que vaya en contra de los derechos de nuestro pueblo», afirmó el gobernador peronista, acompañado por el ministro de Salud, Nicolás Kreplak, y el intendente local, Andrés Watson.
En contraste, el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, se reunió el lunes en Casa Rosada con el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y el ministro del Interior, Diego Santilli, junto al mandatario de San Juan, Marcelo Orrego. Tras el encuentro, Llaryora reveló que dialogaron sobre «un presupuesto con sentido común, que incentive la producción, que genere empleo y que reduzca la presión fiscal».
Sobre las reformas laboral y tributaria que impulsa Milei, el cordobés aclaró que «no hubo pedido de apoyo» y señaló que «nadie puede hablar de algo que no está presentado». Sin embargo, ofreció su visión: «Creo que en Argentina podemos sacar una modernización del trabajo sentando a los sectores pymes y al sindicalismo. Hay millones de argentinos trabajando en comercios chiquitos y pymes en la informalidad, y esos empresarios quieren formalizarlos pero no tienen las condiciones».

Llaryora insistió en la necesidad de «generar condiciones a las empresas pymes para formalizar la cantidad de empleados que hoy están en negro y que puedan tener aportes jubilatorios y cobertura de salud». El gobernador cordobés mantiene el diálogo con Nación en el marco del bloque de las Provincias Unidas, mientras Kicillof profundiza su postura crítica hacia el Gobierno nacional.




