back to top
lunes, noviembre 17, 2025
Contacto

LO MÁS LEÍDO

te puede interesar

Incendio en Ezeiza: Iron Mountain custodiaba archivos clave de la causa ANDIS

spot_imgspot_imgspot_img

Una serie de explosiones sacudió la anoche del viernes en la zona sur del Gran Buenos Aires y provocó un incendio masivo en un polo industrial de Carlos Spegazzini, partido de Ezeiza. El siniestro, visible desde barrios porteños, movilizó más de 70 dotaciones de bomberos y dejó 24 personas heridas leves. La autopista Ezeiza-Cañuelas debió cerrarse completamente mientras las llamas consumían cinco plantas industriales.

El incendio que devastó anoche un polo industrial en Ezeiza vuelve a poner en el centro de la escena a Iron Mountain, empresa que custodiaba documentación sensible en medio de una investigación judicial de alto impacto. La firma, que ya protagonizó un siniestro fatal en 2014, guardaba archivos de la farmacéutica Suizo Argentina, cuyos dueños están implicados en el escándalo de corrupción que salpica a Karina Milei. El momento del incendio generó suspicacias en el ámbito judicial y político.

Iron Mountain no es una firma desconocida en la crónica de incendios sospechosos. La empresa de custodia de documentos estuvo en el ojo de la tormenta en 2014 cuando un siniestro en su depósito de Barracas dejó víctimas fatales y destruyó archivos judiciales sensibles. Ahora, en pleno avance de la causa ANDIS —donde Karina Milei está seriamente involucrada y acusada por el cobro de coimas—, vuelve a aparecer en escena tras la explosión que arrasó con sus instalaciones en Ezeiza.

Explosión e incendio en el Polo Industrial de Ezeiza.
Foto: Gentileza NA

La coincidencia temporal no pasó desapercibida: Iron Mountain custodiaba los archivos de la farmacéutica Suizo Argentina, cuya familia propietaria, los Kovalivker, está seriamente implicada en el pago de coimas que beneficiaban a la droguería investigada en el marco del escándalo ANDIS. Las llamas alcanzaron precisamente los depósitos donde se guardaba esta documentación, destruyendo evidencia clave justo en el momento más crítico de la investigación judicial por corrupción que alcanza al círculo íntimo del presidente Javier Milei.

¿Casualidad o causalidad? La pregunta resuena en pasillos judiciales y entre legisladores de la oposición, que ya comienzan a exigir explicaciones y pericias exhaustivas sobre el origen del siniestro. La recurrencia de Iron Mountain en incendios de características sospechosas, sumada al timing del hecho y la naturaleza de la documentación destruida, alimentan las dudas sobre si se trató de un accidente industrial o de una maniobra para obstruir una causa que compromete directamente al poder político.

La crónica de una noche llena de explosiones

Eran apenas las nueve de la noche cuando una explosión de enorme magnitud estremeció el sur del Conurbano. Un hongo naranja iluminó el cielo de Carlos Spegazzini y la onda expansiva rompió vidrios, voló puertas y techos en un radio de hasta cuatro kilómetros. El resplandor fue visible incluso desde barrios porteños como Caballito, Palermo y Belgrano, mientras las redes sociales comenzaban a llenarse de videos caseros que mostraban la dimensión del desastre. El foco del incendio se ubicó en un parque industrial a la altura del kilómetro 46,5 de la autopista Ezeiza-Cañuelas, que debió ser totalmente cerrada al tránsito.

Más de 380 efectivos de bomberos, distribuidos en 70 dotaciones provenientes de una decena de municipios del Conurbano, trabajaron durante toda la noche para controlar las llamas. La Policía Federal colaboró con el operativo y se desplegaron dos helicópteros: uno para tareas de sobrevuelo y otro preparado para eventuales evacuaciones sanitarias. A la primera explosión le siguieron otras, alimentando el temor de los vecinos que fueron evacuados de manera preventiva mientras el fuego avanzaba sobre las instalaciones industriales.

El parte oficial del Ministerio de Salud bonaerense reportó 24 personas heridas, ninguna de gravedad. El Hospital Eurnekian atendió a ocho pacientes, seis de los cuales fueron dados de alta y dos derivados a clínicas privadas. Otros 15 vecinos fueron asistidos en centros de salud de la zona por lesiones leves causadas por la onda expansiva. También ingresó un directivo empresarial con un infarto, quien permanece estable en terapia intensiva. El Centro Provincial de Toxicología recibió 45 consultas durante la madrugada, aunque el ministro Nicolás Kreplak descartó riesgos graves y explicó que la nube tóxica se estaba disipando con el viento matinal.

Las empresas afectadas son Iron Mountain —la misma firma que protagonizó un incendio fatal en Barracas en 2014—, Larroca Minera, Almacén de Frío, Aditivos Alimentarios y la distribuidora Salón. Este dato reavivó el debate sobre controles y habilitaciones en zonas industriales densamente pobladas. Mientras continúan los peritajes y los bomberos trabajan sobre focos remanentes, la Provincia y el municipio buscan determinar el origen de las explosiones y establecer responsabilidades en uno de los incidentes industriales más graves de los últimos años en el sur del Gran Buenos Aires.

además

<