- Bomberos y brigadistas trabajan sin descanso en las Altas Cumbres y Villa Giardino, mientras las autoridades esperan un cambio de viento que podría complicar las tareas de extinción. Las condiciones climáticas extremas mantienen en alerta a toda la provincia.
Más de 150 efectivos continuaban este sábado por la mañana combatiendo uno de los incendios más importantes de la temporada en Córdoba, que se desató el viernes en la Quebrada del Condorito, a la altura del kilómetro 60 de la ruta 34, en el Camino de las Altas Cumbres. El operativo, que se desplegó desde las primeras horas, involucra a brigadistas del Plan Provincial de Manejo del Fuego, ETAC, bomberos voluntarios de la Agrupación Serrana y la Federación Provincial, efectivos de la Policía de Córdoba, Parques Nacionales y Gendarmería Nacional.
El combate aéreo representa uno de los pilares fundamentales en las tareas de extinción. Dos aviones y dos helicópteros del Sistema Nacional de Manejo del Fuego, junto a un avión hidrante provincial, trabajan coordinadamente para intentar controlar las llamas que afectan principalmente pastizales en la zona serrana. La mayor parte del personal desplegado se concentra en detener el avance del fuego antes del mediodía, ante el pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional que advierte sobre un cambio de viento al sector sur previsto para las 15 horas.
La situación se complicó durante la madrugada cuando se registró un nuevo foco ígneo en Villa Giardino. Desde primeras horas, 75 efectivos entre bomberos voluntarios y personal del ETAC, respaldados por tres aviones hidrantes, trabajan en el lugar. Aunque actualmente el incendio no presenta actividad en su perímetro, persisten altas temperaturas en el terreno, lo que obliga a mantener la vigilancia constante y la instalación de equipos de bombeo para asegurar el sector afectado.
Las autoridades provinciales advierten que las condiciones climáticas continuarán siendo extremas durante el resto de la jornada. Los factores de riesgo incluyen altas temperaturas, baja humedad ambiente y vientos variables que pueden reactivar focos aparentemente controlados o generar nuevos incendios en diferentes puntos de la provincia.
Ante este escenario crítico, las autoridades solicitaron enfáticamente a la población que no realice ninguna actividad que pueda generar fuego, como quemas de pastizales, fogatas o uso de elementos que produzcan chispas. Asimismo, se pide a los vecinos mantener la máxima alerta y reportar de inmediato cualquier señal de humo a los números de emergencia, ya que la detección temprana resulta fundamental para evitar que los focos se propaguen fuera de control.




