El fenómeno romántico que nació en Wattpad llega a su final. Prime Video estrena Culpa Nuestra, la tercera y última parte de la trilogía basada en los libros de Mercedes Ron, una historia de amor, deseo y segundas oportunidades que conquistó a toda una generación.
Está en Prime Video, acaba de estrenarse y marca el final de una trilogía romántica que arrasó en todo el mundo. Lo que empezó como un relato en Wattpad terminó convirtiéndose en un fenómeno audiovisual que cautivó a millones: la saga “Culpables”, creada por la escritora española Mercedes Ron, llega a su cierre con Culpa Nuestra (2025).
Todo comenzó con Culpa Mía (2023), la historia de Noah y Nick, dos jóvenes de mundos opuestos que descubren que no siempre se elige de quién enamorarse. La química entre Nicole Wallace y Gabriel Guevara traspasó la pantalla, y Prime Video convirtió aquel amor prohibido en una trilogía que creció junto a su público: Culpa Tuya (2024) llevó el vínculo al límite, entre celos, heridas y reconciliaciones, y ahora Culpa Nuestra le da un cierre tan emotivo como maduro.
En esta última entrega, Noah y Nick se reencuentran tras años de distancia. Ella intenta rehacer su vida; él, enfrentarse a su destino familiar. El amor entre ambos, más adulto pero igual de intenso, los vuelve a poner frente a aquello que nunca pudieron olvidar. Con una dirección más sobria y un tono cargado de nostalgia, la película explora los temas del perdón, la memoria y la madurez emocional, convirtiéndose en el cierre que los fanáticos esperaban.
El universo de Culpables trascendió lo literario: se transformó en una comunidad global donde millones de seguidores comparten teorías, playlists y escenas favoritas. Mercedes Ron, que empezó escribiendo desde su habitación en Sevilla, es hoy una voz generacional que traduce la intensidad del amor joven en historias que emocionan y duelen al mismo tiempo.
Con Culpa Nuestra, Prime Video cierra una etapa que mezcló lujo, deseo y vulnerabilidad, y que demostró que los amores imposibles —aunque duelan— siguen siendo el motor más poderoso del cine romántico.
