La capital económica de Benín recuperó la calma y las actividades cotidianas se reanudaron con normalidad luego de que las fuerzas leales al gobierno frustraran un intento de golpe de Estado que puso en jaque al presidente Patrice Talon durante las primeras horas del sábado 7 de diciembre.
El golpe comenzó en la madrugada cuando un grupo de militares atacó la residencia oficial del presidente Patrice Talon en Cotonú. La situación escaló rápidamente cuando soldados bajo el mando del teniente coronel Pascal Tigri tomaron el control de la estación nacional de televisión, desde donde proclamaron que el mandatario había sido «destituido de sus funciones».
Sin embargo, la intentona golpista no prosperó y fue sofocada por las fuerzas de seguridad leales al gobierno constitucional. El fracaso de la sublevación permitió que en pocas horas la situación volviera a la normalidad en Cotonú, la principal ciudad y centro económico del país africano.
Los habitantes de la capital económica beninesa retomaron sus actividades habituales tras el intento fallido, en una muestra de que las instituciones democráticas lograron imponerse ante el intento de ruptura del orden constitucional. Las autoridades aún no han proporcionado detalles sobre los detenidos ni las consecuencias que enfrentará el teniente coronel Tigri y sus seguidores.
Este episodio se suma a la ola de golpes de Estado que han sacudido a África Occidental en los últimos años, aunque en este caso la rápida respuesta de las fuerzas leales al gobierno evitó que Benín se sumara a la lista de países de la región que han sufrido quiebres institucionales.
Cotonú tiene una historia fascinante como principal ciudad y puerto de Benín
Cotonú está ubicada en África Occidental, específicamente en la costa sur de Benín, sobre el Océano Atlántico. Benín es un país estrecho y alargado que se extiende desde la costa atlántica hacia el interior del continente. Cotonú ocupa una posición estratégica en la costa, lo que explica su importancia como puerto y centro comercial de la región. La ciudad actúa como puerta de entrada marítima no solo para Benín, sino también como punto de tránsito comercial para países vecinos del interior sin salida al mar, como Níger y Burkina Faso.
Orígenes y período colonial
Cotonú comenzó como un pequeño pueblo de pescadores. Su nombre proviene de la lengua fon y significa «en la boca del río de la muerte». Durante el siglo XIX, los franceses establecieron allí un puesto comercial y en 1883 firmaron un tratado con el rey de Dahomey (antiguo nombre de Benín) que les permitió instalarse en la zona. En 1960, cuando Dahomey obtuvo su independencia de Francia, Cotonú ya era el principal puerto del país.
Capital económica Aunque Porto–Novo es la capital oficial de Benín, Cotonú se convirtió en el verdadero centro económico, comercial y administrativo del país. Es la ciudad más poblada, con más de un millón de habitantes en su área metropolitana. Su puerto es fundamental para la economía nacional y regional, sirviendo también como punto de tránsito para países vecinos sin salida al mar como Níger.
Geografía y desarrollo La ciudad está situada en la costa atlántica, en una estrecha franja de tierra entre el océano y la laguna de Nokoué. Su posición estratégica la convirtió en un importante centro de comercio transatlántico, aunque tristemente también fue uno de los puntos del tráfico de esclavos durante la época colonial.
Actualidad Hoy Cotonú es una ciudad vibrante, multicultural y en constante crecimiento, con un importante mercado (el Dantokpa, uno de los más grandes de África Occidental), universidades y una intensa actividad comercial que la mantiene como el corazón económico de Benín.
