En la base de la FPA se llevó a cabo este martes el acto de jura de 244 nuevos oficiales formados por la Universidad Provincial de Córdoba. El gobernador Martín Llaryora encabezó la ceremonia
Este martes, en la base de la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA) se llevó a cabo la toma de juramento a los 244 nuevos oficiales de la Fuerza, formados por la Universidad Provincial de Córdoba. El acto representó un nuevo refuerzo para la lucha contra el narcotráfico en la provincia y contó con la presencia de las principales autoridades del gobierno provincial.
En la ceremonia estuvo presente el gobernador de la Provincia de Córdoba, Martín Llaryora, quien encabezó el acto junto al Ministro de Justicia y Trabajo, Julián López; el Ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros; y el Fiscal General de la Provincia, Juan Manuel Delgado, entre otras figuras políticas del ámbito provincial vinculadas a la seguridad y la justicia.

De los nuevos oficiales que juraron este martes, 79 ya se encuentran trabajando desde hace cuatro meses en operativos de la FPA. «Son parte de una fuerza de élite, con capacitación universitaria del máximo nivel, única en Sudamérica», remarcó Llaryora durante su discurso, destacando la formación académica y profesional que recibieron los nuevos agentes en la Universidad Provincial de Córdoba.
El mandatario provincial les pidió a los flamantes oficiales que hagan valer los recursos que se invierten en la seguridad contra el narcotráfico, tomando en cuenta la cantidad de agentes, de fiscalías y los elementos destinados para llevar a cabo las tareas de investigación y combate al crimen organizado. Llaryora enfatizó la importancia de aprovechar al máximo la estructura y los medios que la provincia destina a esta área estratégica.
«Nosotros vamos a seguir defendiéndolos, invirtiendo y capacitando», señaló Llaryora, y luego afirmó, como en otras ocasiones, que Córdoba es un territorio hostil para los narcotraficantes. El gobernador reafirmó así el compromiso provincial de continuar fortaleciendo la FPA con más recursos humanos, tecnológicos y presupuestarios para enfrentar el flagelo del narcotráfico en la región.






