Ferndo Bladys dialogoó con minutocordoba.r y La 10 Córdoba y recordó su llegada al cuarteto y como evolucinó en l socieldad y como el cuarteto lo eligió.
En un hecho histórico para la cultura argentina, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró esta mañana al Cuarteto Cordobés como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. La distinción fue aprobada por unanimidad en la Vigésima Sesión del Comité Intergubernamental, que se celebra en Nueva Delhi, India, consagrando internacionalmente al ritmo del “tunga-tunga” como un tesoro cultural vivo y en constante evolución.
El camino hacia esta consagración comenzó en 2022, cuando la gestión municipal del entonces intendente Martín Llaryora impulsó formalmente la candidatura, un proceso que fue continuado y apoyado por el actual jefe comunal, Daniel Passerini. La postulación fue un esfuerzo conjunto y transversal, coordinado por la Cancillería Argentina y el Ministerio de Cultura de la Nación, que culminó con la presentación del expediente titulado “Cuarteto, Música, Letra y Danza en la Ciudad de Córdoba”.
Este documento, fruto de extensos debates y recopilación de testimonios, no solo recorrió la historia del género desde su nacimiento en 1943 de la mano de la pianista Leonor Marzano, sino que fundamentó su valor como práctica social comunitaria. La UNESCO destacó al cuarteto como un fenómeno que trasciende la música para englobar una danza distintiva, letras que narran la vida cotidiana, y un ritual de pertenencia que fortalece los lazos identitarios de generaciones de cordobeses y argentinos.
Un patrimonio vivo y en transformación
La declaración se enmarca en la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de 2003, que protege aquellas expresiones que las comunidades reconocen como parte integral de su cultura. El cuarteto encarna perfectamente este concepto: es un arte dinámico, que supo absorber influencias caribeñas y afrolatinas, sobrevivir a períodos de censura y reinventarse década a década sin perder su esencia festiva y popular.
Desde los bailes de barrio hasta los masivos recitales en estadios, el cuarteto ha sido el sonido de la alegría colectiva, la picardía y la resiliencia. Figuras icónicas como Carlos “La Mona” Jiménez y Rodrigo “El Potro” Bueno, junto a una legión de artistas y orquestas, fueron pilares en su expansión nacional y en la construcción de su leyenda.
Reacciones y celebración
La noticia ha desatado una ola de orgullo y festejos en Córdoba y en todo el país. En redes sociales, artistas, instituciones y miles de adherentes celebraron con el hashtag #CuartetoPatrimonioDeLaHumanidad. Se espera que la declaración no solo sirva como reconocimiento, sino que también impulse políticas públicas para la salvaguardia, investigación y proyección internacional del género.
“Hoy no solo se honra un ritmo, se honra la identidad de un pueblo. El cuarteto es la banda sonora de nuestras vidas, y ahora el mundo entero lo reconoce como lo que siempre fue: un patrimonio invaluable”, declaró emocionado un representante de la cultura cordobesa al conocerse el fallo.
Con este logro, el Cuarteto Cordobés se suma a una lista selecta de expresiones culturales argentinas distinguidas por la UNESCO, como el Tango y el Fileteado Porteño, reafirmando la riqueza y diversidad del país en el panorama cultural global. Las celebraciones en las calles de Córdoba prometen extenderse, al compás de un “tunga-tunga” que, desde hoy, resuena con título de patrimonio mundial.
